TE INVITAMOS A CONOCER EL CONVENIO DE ROTTERDAM

El imponente aumento de la producción y el comercio de productos químicos ha suscitado la preocupación tanto del sector público como de los gobiernos en relación con los riesgos potenciales que plantean estos productos químicos peligrosos y los plaguicidas. Por esta razón, se acordó crear el “Convenio de Rotterdam” para dar solución a temas sensibles dentro de cada uno de los países. Conocé de qué se trata en esta nota.

Los países que carecen de una infraestructura adecuada para supervisar la importación y el uso de estos productos químicos son los más vulnerables y es uno de los temas que se están tratando en la convención del cambio climático en Bonn, en donde los países en desarrollo buscan que los más industrializados cooperen en forma financiera para lograr que todos avancemos de la misma manera.

En respuesta a estas preocupaciones, el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) y la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) comenzaron a desarrollar y promover programas voluntarios de intercambio de información a mediados de la década de 1980.
La FAO introdujo en 1985 su Código Internacional de Conducta para la Distribución y Utilización de Plaguicidas, y el PNUMA estableció en 1987 las Directrices de Londres para el Intercambio de Información Acerca de Productos Químicos Objeto de Comercio Internacional.

Las dos organizaciones introdujeron conjuntamente el procedimiento de consentimiento fundamentado previo (CFP) de 1989. Este programa, aplicado conjuntamente por la FAO y el PNUMA, ha ayudado a garantizar que los gobiernos dispongan de la información sobre los productos químicos peligrosos que les es necesaria para evaluar los riesgos y adoptar decisiones fundamentadas sobre las importaciones de productos químicos.

Los países tomaron decisiones en base a estar conscientes de los efectos perjudiciales para la salud humana y el medio ambiente de los plaguicidas no controlados que se convierten en productos químicos peligrosos, recordando el inicio de todo el proceso en Rio sobre la gestión medio ambiental y  teniendo en cuenta que las naciones unidades tiene que velar por el seguimiento de los acuerdos tomados, controlar a los paises industrializados y ayudar a los en vías de desarrollo, entendiendo las necesidades de mantener información clara para todos y por último, reconociendo que las buenas practicas en el manejo de los productos químicos es la única forma de mantener los estándares, resolviendo que es imperioso proteger la salud humana y el medio ambiente, acordaron en forma conjunta que se resuelva este acuerdo de Rotterdam, el que cuenta con 30 artículos que van a regir la forma en que debemos gestionar nuestros productos químicos.

En resumen, el objetivo principal del Acuerdo de Rotterdam es promover la responsabilidad compartida y los esfuerzos conjuntos de las Partes en la esfera del comercio internacional de ciertos productos químicos peligrosos a fin de proteger la salud humana y el medio ambiente frente a posibles daños y contribuir a su utilización ambientalmente racional, facilitando el intercambio de información acerca de sus características, estableciendo un proceso de adopción de decisiones sobre su importación y exportación y difundiendo esas decisiones a todos los involucrados en el proceso de producción y venta.

Desde la Organización para el Desarrollo Sustentable te acercamos información relevante con respecto a la Conferencia sobre el Cambio Climático que se está llevando a cabo en la ciudad de Bonn, Alemania. Allí se están decidiendo cuestiones fundamentales para el futuro de todos nosotros, es por eso que creemos que es muy importante que conozcas acerca de este tema a través de nuestras notas de interés.
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