Organización para el Desarrollo Sustentable

ARGENTINA AFUERA DEL “PACTO DEL FUTURO” : UN PASO ATRÁS EN EL DESARROLLO GLOBAL

La reciente decisión del presidente Javier Milei de retirar a Argentina del “Pacto del Futuro”, una ambiciosa iniciativa impulsada por la ONU, ha generado una fuerte polémica tanto en el ámbito nacional como internacional. El anuncio, hecho por la canciller Diana Mondino, marca un punto de quiebre en la política exterior del país, alejándose de un acuerdo que busca abordar desafíos globales como el cambio climático, la inteligencia artificial y la paz mundial. Mientras algunos sectores celebran la postura soberana de Argentina, otros advierten que el rechazo a este pacto podría aislar al país de la comunidad internacional y comprometer su papel en la construcción de un futuro sostenible. ¿Qué significa realmente esta decisión para Argentina y para el escenario global? En esta nota te comentamos acerca de que trata este importante paso que realiza la Organización de las Naciones Unidas en concretar acciones concretas por un futuro mejor y como nos va a impactar como sociedad civil este tipo de decisiones a la Argentina no adherir y quedar afuera de esta alianza global por un futuro más justo y sostenible.

¿Qué es el “Pacto del Futuro”?

El “Pacto del Futuro” es una ambiciosa iniciativa lanzada por la Organización de las Naciones Unidas (ONU) con el objetivo de enfrentar los retos más urgentes del siglo XXI. Este acuerdo se diseñó a lo largo de dos años de negociaciones y consultas globales, y su propósito principal es sentar las bases para una gobernanza multilateral más inclusiva y efectiva.

Entre sus principales áreas de acción se encuentran:

  1. Cambio Climático: Profundiza los compromisos establecidos en el Acuerdo de París, buscando que los países implementen medidas más audaces para mitigar el calentamiento global y reducir sus emisiones de carbono.
  2. Inteligencia Artificial y Tecnología: Propone el desarrollo de normas éticas y consensos globales sobre el uso de la inteligencia artificial y otras tecnologías emergentes, con el fin de evitar el aumento de desigualdades y garantizar un uso responsable.
  3. Paz y Seguridad: Establece un marco para fortalecer la arquitectura multilateral con miras a prevenir conflictos, garantizar la paz y asegurar la estabilidad global en un mundo cada vez más interconectado.
  4. Economía Sostenible: Promueve un crecimiento económico estable que beneficie a las nuevas generaciones, abordando las desigualdades y fomentando la cooperación internacional para cerrar las brechas en desarrollo.

Países Adheridos al Pacto

A diferencia de Argentina, que ha decidido distanciarse de este acuerdo, la mayoría de los países miembros de la ONU han respaldado la iniciativa. Entre los países que han confirmado su adhesión al “Pacto del Futuro” se encuentran:

  • Unión Europea: Todos sus miembros han apoyado el pacto, destacando la necesidad de liderar la lucha contra el cambio climático y regular las nuevas tecnologías a nivel global.
  • Estados Unidos: Aunque su compromiso ha sido matizado por disputas internas, el país ha reafirmado su apoyo, en especial en lo que refiere a la inteligencia artificial y la estabilidad económica.
  • China y Rusia: Ambas potencias han mostrado interés en la gobernanza tecnológica propuesta por el pacto, aunque con reservas sobre las implicaciones para su soberanía.
  • Países en desarrollo: Naciones de África, Asia y América Latina han respaldado el pacto, atraídas por la promesa de mayor equidad en el acceso a tecnologías y una transición energética justa.

El “Pacto del Futuro” se perfila como una hoja de ruta para la cooperación global, en un contexto de creciente fragmentación. Sin embargo, la negativa de Argentina y otros países en sumarse plantea interrogantes sobre el futuro de esta iniciativa y la capacidad de la ONU para mantener su relevancia en un mundo multipolar.

Aspectos Clave del “Pacto del Futuro”

El “Pacto del Futuro” no solo aborda temas de sostenibilidad y cooperación global, sino que también se enmarca en un contexto de “profunda transformación global”, como lo describe la ONU. Según António Guterres, secretario general de la organización, el pacto advierte sobre los “riesgos catastróficos y existenciales crecientes” que podrían sumergir al mundo en “un futuro de crisis y colapso persistentes” si no se toman medidas urgentes.

Entre las disposiciones más relevantes del pacto se encuentran:

  1. Reforma del Consejo de Seguridad de la ONU: Una de las propuestas más ambiciosas es la reforma del Consejo de Seguridad, para que refleje mejor la geopolítica actual. Esta incluye la reparación de la “injusticia histórica contra África”, que actualmente no cuenta con un asiento permanente, y busca mejorar la representación de regiones como Asia-Pacífico y América Latina.
  2. Desarme Nuclear y Seguridad Espacial: El pacto marca un hito en el desarme nuclear, siendo el primer acuerdo multilateral en más de una década en abordar este tema. También compromete a los líderes a evitar una carrera armamentista en el espacio exterior y a regular el uso de armas autónomas letales, temas de creciente preocupación en un mundo donde las tensiones tecnológicas y militares son cada vez más evidentes.
  3. Gobernanza de la Inteligencia Artificial: Otra innovación significativa es el “Pacto Digital Global”, que establece el primer acuerdo universal sobre la gobernanza internacional de la inteligencia artificial. Este marco busca regular el desarrollo y uso de estas tecnologías emergentes para garantizar que su avance no profundice las desigualdades existentes ni genere riesgos incontrolables.
  4. Derechos Humanos y Equidad de Género: En respuesta a los retrocesos en derechos humanos, en especial aquellos relacionados con los derechos reproductivos y la misoginia, el pacto compromete a los gobiernos a eliminar las barreras que impiden a mujeres y niñas desarrollar su potencial en todos los ámbitos. Guterres subrayó la importancia de avanzar en la equidad de género como uno de los pilares fundamentales del pacto.

Impacto de la Decisión en Argentina

La negativa de Argentina a adherir al “Pacto del Futuro” podría tener repercusiones significativas en su desarrollo y su capacidad para enfrentar desafíos globales. Algunos de los posibles impactos negativos incluyen:

  1. Cambio Climático: En un país altamente vulnerable a los efectos del cambio climático, la exclusión de Argentina de iniciativas globales como el “Pacto del Futuro” podría resultar contraproducente. Según un informe del Banco Mundial, Argentina ha perdido alrededor de 2,6% de su PIB anual debido a los efectos del cambio climático, como inundaciones y sequías. La participación en el pacto, que refuerza los compromisos del Acuerdo de París, hubiera permitido al país acceder a más recursos y cooperación internacional para mitigar estos efectos.
  2. Economía y Comercio Internacional: Argentina enfrenta dificultades para posicionarse competitivamente en la economía global. De acuerdo con el Índice de Competitividad Global 2023 del Foro Económico Mundial, el país ocupa el puesto 83 de 141 economías, reflejando problemas en innovación y tecnología. Al negarse a participar en un pacto que promueve una mayor gobernanza tecnológica y regulación de la inteligencia artificial, Argentina podría estar perdiendo la oportunidad de integrarse a los avances tecnológicos que serán clave en el futuro del desarrollo económico global.
  3. Acceso a Innovación Tecnológica y Gobernanza de IA: La inteligencia artificial se está convirtiendo en un factor determinante en la economía mundial. Según un estudio de Accenture, para 2030, la IA podría agregar hasta 14 billones de dólares al PIB mundial. Al rechazar el “Pacto Digital Global”, Argentina podría quedar rezagada en términos de desarrollo tecnológico, perdiendo acceso a normas y regulaciones clave que promueven un desarrollo ético y equitativo de estas tecnologías. Esto podría ampliar la brecha digital del país y afectar su competitividad.
  4. Inversiones en Energía y Desarrollo Sostenible: Según la Agencia Internacional de Energía (AIE), la transición hacia energías limpias podría generar más de 43 millones de empleos a nivel global para 2030, muchos de ellos en países en desarrollo. Al no alinearse con un pacto que busca establecer una hoja de ruta para un crecimiento económico sostenible, Argentina corre el riesgo de perder inversiones clave en energía renovable y otros sectores verdes que podrían impulsar su economía y generar empleos.

La decisión de Argentina de distanciarse del “Pacto del Futuro” no solo compromete nuestra participación en un esfuerzo global por construir un mundo más justo y sostenible, sino que también pone en riesgo nuestra capacidad para enfrentar de manera efectiva los desafíos que ya están afectando al país, como el cambio climático, la desigualdad y el acceso a la tecnología. En el marco de la Agenda 2030, el desarrollo sostenible no es una opción, sino una necesidad urgente. Al no sumarnos a iniciativas internacionales que buscan reformas estructurales, como la del Consejo de Seguridad de la ONU o la gobernanza de la inteligencia artificial, nos alejamos de soluciones colaborativas que pueden beneficiar a las generaciones actuales y futuras.

Sin embargo, esta decisión política no debe desalentarnos. Al contrario, resalta aún más la importancia del papel de la sociedad civil en la promoción de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS). En tiempos de incertidumbre, la acción ciudadana cobra mayor relevancia. Como sociedad, podemos y debemos impulsar cambios desde nuestras comunidades. Algunas acciones que podemos tomar incluyen:

  • Exigir políticas públicas más alineadas con la sostenibilidad y la cooperación internacional. Esto implica no solo votar con conciencia, sino también participar activamente en diálogos y espacios de decisión pública.
  • Fomentar alianzas entre el sector privado, ONGs y el Estado para desarrollar proyectos locales que mitiguen los efectos del cambio climático, promuevan la educación inclusiva y faciliten el acceso a tecnologías emergentes de manera justa.
  • Apoyar iniciativas de base comunitaria que promuevan la economía circular, el consumo responsable y el desarrollo de energías limpias.

A pesar de esta desconexión a nivel gubernamental, no debemos perder de vista que la Agenda 2030 y sus 17 Objetivos siguen siendo una hoja de ruta global a la que todos podemos contribuir. El compromiso con un futuro más sostenible no depende solo de decisiones políticas; también es responsabilidad de cada uno de nosotros como ciudadanos.

Desde la Organización para el Desarrollo Sustentable queremos reivindicar nuestro compromiso en poner en alto los 17 Objetivos para el Desarrollo Sostenible por un futuro mejor para todos. Sigamos actuando, conscientes de que cada pequeña acción local tiene un impacto global. Sumate a nuestras acciones concretas por un mundo más justo, pacífico y sostenible para todos. Forma parte de nuestro Programa de Voluntariado para no dejar a nadie atrás.

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Una respuesta

  1. Gaby Lazarte dice:

    Triste estamos involuciónando como país.
    Acaso no ve nuestro presidente, todo el daños que sufrimos por el cambio climáticos? venimos sufriendo incendios incontrolables, no se da cuenta que cada vez más se sufre mas el calor, los incendios, el deshielo.
    Necesitamos alzar la voz. La agenda 2030 es un plan de acción a favor del planeta, de las personas.

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