Organización para el Desarrollo Sustentable

CAMBIO CLIMÁTICO: LAS ABEJAS TAMBIÉN LO SUFREN

Las abejas son fundamentales para mantener el equilibrio de nuestra casa común y poder tener una economía más sustentable. Científicos británicos hallaron variaciones en la comunidad de estos insectos en los 100 años últimos. La cifra de abejas e insectos polinizadores que viven en el mundo se ha reducido poco a poco en los últimos años a causa del cambio climático. En esta nota te contamos más acerca de este fenómeno.

Es primordial decretar si en el pasado las abejas han sufrido estrés para darse cuenta como los causantes de este fenómeno incitan las respuestas naturales de las especies actuales frente al cambio climático. Un grupo de especialistas del Imperial Collage de Londres y del Museo de Historia Natural de Londres informaron mediante artículos sus reflexiones sobre el poblado de abejas y abejorros del Reino Unido.

A la hora de analizar diferentes especies de abejas de todo el país, los científicos hallaron que el estrés se iba acrecentando a medida que trascurrían los años. Un estudio posterior reveló que cada variedad de abejas mostró una señal de estrés notablemente superior que en la segunda mitad del siglo XX.

En el primer análisis se inspeccionó la morfología de 1900 ejemplares de abejas, haciendo uso de imágenes digitales. El personal investigó la asimetría en las alas de los zánganos como indicador de estrés, poseen alas izquierda y derecha con estructuras muy diferentes que reflejan el estrés que sufrieron durante su desarrollo, siendo este un agente que impactan de forma negativa en su crecimiento normal.

Las condiciones climáticas repercuten de forma efectiva en los insectos. Se vio que en el trascurso de la recolección, la temperatura media anual se había visto aumentada. El grupo de científicos revelo que en los años más calientes y húmedos, las abejas indicaban una mayor asimetría en sus alas. Las definiciones de los estudios se informaron en el Journal of Animal Ecology.

Citamos a un investigador de la Universidad de Suffolk, llamado Andrés Arce “El objetivo principal es comprender mejor las respuestas a agentes ambientales específicos y aprender del pasado para predecir el futuro. Esperamos poder predecir cuándo y dónde las abejas estarán en mayor riesgo para apuntar a una acción de conservación afectiva”.

En un segundo estudio, se realizó una progresión exitosa de más de cien especies de abejorros de distintos museos que existen desde hace más de 130 años. En un destacado avance se vió que los ADN que se usan para analizar mamuts lanudos y humanos antiguos, se adaptaron por primera vez a una población de insectos.

Los especialistas calcularon la conservación del ADN, usando una pata de cada abeja analizada, partiendo de estas evaluaciones, publicados en Methods in Ecology & Evolution, los científicos tienen la certeza para analizar como el estrés puede llevar a la perdida de diversidad genética. El personal ahora utilizara esos datos obtenidos para estudiar como los genomas de las abejas han ido modificándose con el tiempo, y de esa forma entender como las poblaciones enteras se han adaptado o no se adaptan al marco cambiante.

“El surtido de insectos expuestos en museos brindan la ocasión para estudiar directamente como los genomas de las especies se vieron alterados por cambios ambientales al paso del tiempo. No obstante son un recurso finito e importante para comprender como ser usados mejor en los estudios genéticos”, señalo la Dra. Victoria Mullin, del Museo de Historia Natural de Londres.

Enfocándose en las colecciones de abejas, el grupo trabajó con curadores del Museo de Historia Natural de Londres, el museo de Historia, los Museos Nacionales de Escocia, El Museo de Historia Nacional de la Universidad de Oxford, el Museo Tullie House de Carlisle y por ultimo también El museo Mundial de Liverpool. El profesor Ian Barnes, investigador del Museo de la Historia Natural situada en Londres, fue el actor principal del Analisis. Expresó: “Uno de los principales problemas con las colecciones de los museos es la Calidad del ADN sea variable. Actualmente tenemos una idea mucho más óptima sobre la conservación del ADN en las colecciones de insectos, lo que
se considera un amplio impulso para nuestro trabajo en trascurso para entender la historia y el futuro de las poblaciones de insectos”

No queda duda que las abejas se encuentran en peligro de desaparecer y esto se manifiesta en ellas debido al daño que los ciudadanos causan a nuestro medio ambiente, poniendo también en riesgo la vida de las personas y animales que habitan nuestro mundo.
Es por eso que te invitamos a que construyamos un futuro mejor a través de un trabajo colaborativo de la mano de la Organización para el Desarrollo Sustentable
Sumate al Programa de Voluntariado Virtual ODS, juntos podemos realizar acciones concretas para que nadie se quede atrás.

Una respuesta

  1. Gaby lazarte dice:

    Nuestras abejas se encuentran en peligro de extinción y es por ello la importancia de cuidarlas para frenar el daño que les causa el cambio climático que estamos sufriendo, son muy imprescindibles para nuestro medio ambiente.

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